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La casita del horror

La leyenda de Panchita, la casa de las brujas

La casa de las brujas

Ruidos inexplicables que se sienten en las noches. Fenómenos paranormales que asustan a más de uno. En la Colonia Roma de Ciudad de México se levanta una arquitectura llena de misterios y extrañas energías conocida como “La Casa de las Brujas”.

Por sus ventanas y techo, un rostro de una bruja con sombrero incluido, se puede apreciar en la fachada de este edificio ubicado entre las calles Orizaba y Durango, el cual se levantó en 1908 por orden de Porfirio Díaz para celebrar el Centenario de la Independencia mexicana.

Se dice que en este peculiar inmueble, habitó Panchita, una bruja que se dedicaba a sanar de cualquier enfermedad a las personas que acudían a ella.

Panchita, cuyo nombre real era Bárbara Guerrero, tenía poderes curativos para eliminar afecciones de todo tipo, incluso aquellas que requerían de operaciones avanzadas. Sus “milagros” hicieron que cada vez, recibiera a más personas de distintas clases.

No importaba lo difícil de la afección, Panchita la curaba. Con sus manos y ayuda de otros espíritus, podía extraer órganos dañados, tumores y eliminar malas energías de todo aquel que lo necesitaba. Sus rituales eran eficaces y llenaban de vida a todo el que lo recibía.

Se dice que solamente utilizaba un cuchillo de cocina para operar a sus pacientes. Sin equipos, sin anestesia. Para la recuperación del paciente, sólo bastaba guardar reposo por tres días y beber las pociones que Panchita preparaba para ellos.

La popularidad y el cariño a Panchita crecieron tanto, que varios políticos y grandes personalidades buscaban un espacio en la ocupada agenda de Panchita para pedirle salud, bienestar y hasta riquezas. Y ella con su efectiva magia negra, se lo concedía.

Panchita nunca cobró por sus consultas y milagros, al menos no de forma oficial. Muchas personas, en forma de agradecimiento por sus favores, le hacían donaciones para que siguiera haciendo sus labores.

Cuenta la leyenda, que después de su muerte, el espíritu de Panchita todavía se percibe entre las paredes del edificio, especialmente en horas de la noche. Algunos cuentan que se les ha aparecido para ofrecerle sus servicios de curandera.

Testimonio

Dicen que este lugar está lleno de misterio, con ruidos extraños, voces que se escuchan y rostros que aparecen de repente en los ojos de los inquilinos del edificio.

De hecho, en octubre del año 2016 una mujer llamada Brenda llamó muy asustada y entre lágrimas a un programa de radio para narrar momentos paranormales que había vivido en el inmueble. Brenda aseguró que seres demoníacos aparecieron en su casa y que no podía dormir por los ruidos que se escuchaban en el lugar.

Por un momento pensó que esos sonidos eran causados por los vecinos, pero al cabo de unos días, se dio cuenta que al lado de su habitación no tenía vecinos y que más bien, los pasillos se caracterizaban por su soledad. Brenda, que no creía en fantasmas, se asustó a tal punto que decidió relatarle la experiencia a una experta en Feng Chui, quien consideró que había una energía extraña y pesada en el lugar.

No todos creen…

Si bien algunas personas aseguran haber escuchado ruidos raros y percibir energías extrañas en los alrededores del lugar, otros piensan que la historia de Panchita y la Casa de Brujas se tratan solamente de otro capítulo del imaginario popular que tanto abunda en la cultura mexicana, repleta de leyendas de todo tipo.

De hecho, algunos consideran que toda la leyenda de Panchita fue creada a raíz del peculiar aspecto del edificio, pues este, forma en su fachada algo muy parecido al rostro de una bruja, y porque realmente haya vivido una bruja allí.

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