Una leyenda que data de la época colonial en México, por la región de Tonalá, en donde hace mucho tiempo atrás la religión no estaba permitida del todo, se dice que históricamente los caciques y hacendados eran quienes regían con su poder sobre el pueblo, de alguna forma gobernando en estos lugares, y en Tonalá no era muy diferente.
“El Sacerdote sin Cabeza”
Así es como llaman comúnmente al espíritu que se deja ver en Jalisco, lugar de origen de este fantasma y sitio en el que se perpetuaron los hechos que lo llevaron a una terrible e injusta muerte.
Como ya te hemos mencionado, antiguamente la religión no estaba permitida, por lo que el sacerdote franciscano fue sentenciado a muerte por predicar la religión, justo al medio de la ciudad se llevó a cabo el acto, en el que, con una orca colgaron a dicho sacerdote.
Para ese tiempo aquel hombre era en realidad muy querido por sus seguidores y fieles de la iglesia, pero por más que aseguraban que el sacerdote era inocente no lograron salvarlo de ser enjuiciado por realizar pactos con el diablo.
Al sacerdote lo encarcelaron en una prisión de la inquisición, por lo que sabía iba a ser torturado hasta que confesara sus pecados, mas no habiendo algún delito solo lo colgaron una y otra vez, en forma de tortura hasta que se declarara culpable.
Los habitantes del pueblo no querían ser partícipes de aquel terrible acto, por lo que no asistieron a la procesión en la que dirigían al sacerdote a una muerte segura, frente a quienes desearan lanzarle piedras, comida o golpes en castigo de sus “malos actos”
Justo a media noche
Cercano a la Parroquia de Santiago Apóstol junto al arco y el campanario, fue donde se torturo y mato al sacerdote de Tonalá, se dice que le habían colocado piedras colgando de los pies, y se lo vistió con un capote amarillo con la cruz de San Andrés y un capirote.
A media noche fue colgado, debido al peso y su cuello ya maltratado por la constante tortura, la fuerza de la cuerda hizo que se desprendiera por completo su cabeza, por lo que ahora se conoce como el “sacerdote sin cabeza”.
En este sitio actualmente se encuentra un parque de niños, quienes dicen ver la silueta de una figura sin cabeza, tal vez por el camino que llego a ser el trayecto de tortura de aquel hombre de Fe.
Muchos aseguran ver un fantasma que relata frases en latín, como si profesara la misa, y que al momento de aparecer se siente un cambio drástico en el ambiente, una brisa helada que abarca el cuerpo de a poco.
Son muchos los lugares en donde se dice ha aparecido este fantasma, pero su origen se encuentra en Jalisco, lugar en donde ocurrió toda la historia, y donde injustamente fue condenado a la orca el sacerdote franciscano.