Entre los relatos más buscados por amantes del terror, nos podemos encontrar con los de apariciones de fantasmas y espíritus que deambulan por el mundo, y en la casona de Cocorit es esto exactamente lo que vamos a hallar, pues existen diferentes testigos que afirman haber visto a una dama deambular por sus pasillos.
¿Qué sucedió?
Esta historia nos traslada a 125 años atrás cuando Albino Almada y su esposa Fermina, en medio de sus muchos viajes trajeron a este lugar a una joven de alrededor de 16 años, para trabajar en la hacienda.
Entre los rumores que rodeaban a esa niña se decía que se trataba de la concubina de Albino Almada, sin embargo nada más se supo de ella, pues un día y sin explicación alguna desapareció.
Cuando los vecinos notaron esto, también se empezó a rumorar que la niña se había ido a otro lugar, pero otros más afirmaron que había muerto e incluso que fue enterrada en aquella casa. Si esto fue verdad o mentira es algo que jamás sabremos, pero algo que sí nos consta es que algunos vecinos afirmaron mirar a una mujer con negligé que se podía ver por la ventana durante las noches.
Se trataba del avistamiento del fantasma de la niña según muchos.
¿Qué aconteció después?
Algunos años más tarde, en 1987 para ser exacto. Un empresario adquirió la propiedad, se cuenta que aquel hombre hizo su estudio en la planta alta e incluso se hizo un autorretrato con la aparecida, para dar a conocer a lo que se enfrentaba ahí.
Dentro de la propiedad actualmente se hallan diferentes cuadros que se dicen pertenecen a avistamientos de aquella dama que ronda los pasillos, e incluso una estatua en donde podemos mirar a un perro ladrando.
¿Cuál es la historia de la estatua de la aparecida?
Es curiosa la historia de esta estatua, ya que en un principio solo era la figura de la aparecida, la que podíamos encontrar, sin embargo con el tiempo una persona que frecuentaba la propiedad acompañado de su perro, noto que este último se ponía muy nervioso y terminaba ladrando sin cesar a la figura.
Tiempo después cuando el animalito perdió la vida, se enterró en ese lugar y se mandó erigir aquella estatua en su honor, justo en la misma posición en la que se le solía ver dentro de la casona en vida.
Como podremos mirar esta casa ha tenido diferentes historias que la han llevado a ser lo que se le considera hoy en día. Un lugar embrujado.
Se cuenta que a través de su historia ha pasado a formar parte de diferentes familias, transformándose en un hospital e incluso alojamiento para gitanos, sin embargo nadie dura mucho tiempo en ella pues cuando miran a la dama que la habita salen huyendo de ahí.