¿Alguna vez has escuchado hablar de los Aluxes?
Se cuenta que justo en la salida de Cancún para tomar la carretera federal de Playa del Carmen, podrás observar debajo de un puente una clase de pirámide muy pequeña en la que habitan Aluxes.
Según la leyenda cuando se estaba levantando el puente del Aeropuerto Nizuc-Cancún, justo en el primer día se terminó derrumbando sin explicación alguna. Los encargados inmediatamente buscaron al culpable de este siniestro, pero desistieron al no hallar ninguna prueba que los guiará hasta él.
Los trabajos continuaron dejando el primer percance atrás, pero para sorpresa y coraje de ellos se repitió una vez más. Evidentemente esto ya estaba lejos de ser una coincidencia y debía haber alguien tirando la obra cada vez que la levantaban, por lo que algunos de ellos se quedaron haciendo guardia para descubrir qué sucedía y hacerlo pagar por los atrasos que estaba provocando.
Ese día todo estuvo tranquilo, hasta que ya más entrada la noche unas criaturas pequeñas iniciaron a tirar la estructura por tercera vez. Los hombres que esperaban mirar a alguna persona en ese momento salieron corriendo, creyendo que se trataban de demonios.
Este acontecimiento fue reportado a los ingenieros que estaban a cargo del puente, y al pedir que traigan un párroco, un sacerdote maya los interrumpió diciéndoles que esos no eran demonios, ni fantasmas, sino aluxes. Guardianes que solo estaban protegiendo sus tierras de invasores y que si deseaban proseguir deberían pedirles permiso.
El sacerdote intervino en nombre de ellos, acordando con las pequeñas criaturas una pirámide donde podrían vivir como una señal del trato pactado.
Se dice que a partir de ese momento el puente continuó sin percances, y al terminar todas las obras esa pirámide fue habitada por los aluxes. En algunas noches las personas que transitan por ahí afirman haber visto a alguno de ellos que aún siguen cuidando del lugar hasta nuestros días.